Su último deseo, convivir como un verdadero soldado
El último deseo de César Diego Almaraz, de nueve años y quien padece leucemia en fase terminal, fue convivir como un verdadero soldado.
Un niño de nueve años, quien padece leucemia y está en fase terminal, se convirtió en soldado honorario de la XXV Zona Militar y con ello cumplió uno de sus sueños.
Se trata del soldadito César Diego Almaraz Pérez quien pidió como último deseo convivir como soldado al lado de compañeros de armas.
El comandante de la XXV Zona Militar, Raúl Gámez Segovia, encabezó la ceremonia para recibir con honores a su soldado honorario, quien ha enfrentado heroicamente dos años de tratamiento contra el cáncer.
Fue en la Escuela Militar de Sargentos donde los mandos militares recibieron a su nuevo compañero que llegó en silla de ruedas y posteriormente abordó un helicóptero que le hizo un sobrevuelo.
Al lado del soldado honorario siempre estuvo su madre, Lucila Pérez, una comerciante de gorditas y quesadillas en Lara Grajales, Puebla, quien lo ha acompañado en todo el tratamiento.
La mujer relató que su objetivo de vida es siempre llevar a su hijo a sus tratamientos en el Issstep hasta que su cuerpo le permita seguir aceptando las quimioterapias.
El jefe de la zona militar explicó que abrir las puertas de la institución armada forma parte de un programa de la Secretaría de la Defensa Nacional para estar más cerca de la sociedad y la población.