DERECHOS HUMANOS Y MILITARES: LA REALIDAD
Cadena de Mando
Por Juan Ibarrola C.
Del 1°de diciembre de 2012 al 30 de noviembre del 2018, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, notificó a la Secretaría de la Defensa Nacional, 3,196 quejas relacionadas a supuestas violaciones de derechos humanos por parte de personal militar. Durante ese período, el 96.15% de estas quejas, -que no recomendaciones- fueron concluidas satisfactoriamente, es decir, se concluyó el proceso que inicia en la denuncia y termina en el deslinde de culpa de quien o quienes fueron denunciados.
Durante el sexenio pasado, las denuncias disminuyeron 68% en relación al sexenio de Felipe Calderón. Se debe tomar en cuenta que en México, del 100% de las denuncias en contra de las fuerzas armadas, el 80% de ellas, no se ratifican, del 20 restante, la mitad son falsas las identidades de quienes las presentan y en el 10% restante, la comprobación de la violación de garantías es muy compleja por lo débil de los argumentos acusatorios.
En lo que va de esta administración, la CNDH notificó a SEDENA, 495 quejas, de las cuales 271 (54.75%) se encuentran en trámite y 224 (45.25%) ya fueron concluidas.
Pocas veces se contabilizan que tanto en operaciones en contra de la delincuencia, como en labores de apoyo social, contactos ciudadano, atención médica, trámites administrativos, etcétera, los soldados de tierra, mar y aire, así como hoy la Guardia Nacional, realizan lo anterior cientos de miles de veces al año.
¡Que se entienda bien! No significa que por recibir una cantidad casi nula de denuncias en contra de las acciones militares donde intervienen soldados y marinos con la ciudadanía, se deben perdonar excesos o abusos; más bien significa que aún y a pesar de que existen movimientos o personas que insisten en evidenciar, ya sea hechos del pasado, -investigados y aclarados- o bien recientes, existe una constante donde no se puede probar la culpabilidad del personal militar o naval.
Llama la atención que cuando se denuncia a los militares respecto a abusos en contra de ciertas personas, no existe una solidaridad social masiva, es decir, la gente sabe bien cuáles son las acciones de las fuerzas armadas en favor de la propia gente.
Pocos saben que desde 1998, se evalúa la materia de derechos humanos en los concursos de promoción al grado inmediato superior. Lo anterior significa que, el conocimiento que cada integrante tenga sobre el tema, es un factor que se toma en cuenta, -como otros tantos- para poder ascender.
En los programas de estudio del sistema educativo militar, se incluyen con carácter “permanente” las asignaturas de derechos humanos y derecho internacional humanitario.
La totalidad de los efectivos del ejército, fuerza aérea y armada de México, están capacitados en todo lo relacionado a no violar derechos humanos. Vale decir que también están condicionados, ya que la Ley de Justicia Militar es clara en ese sentido; también la justicia civil.
Cabo de Guardia.
Se tiene una amenaza de seguridad nacional. Se llama Covid-19 y todo el mundo está alerta de su origen, desarrollo, transformación y por supuesto el impacto tan grande a todo el planeta.
México, no se quedará atrás. Existen reconocidos y exitosos epidemiólogos, sanitaristas, médicos y por supuesto instituciones que están trabajando a marchas forzadas por enfrentar lo inevitable.
Las fuerzas armadas están ahí, apoyando como siempre en todo lo que se necesite, sin embargo, el esfuerzo debemos realizarlo todos los mexicanos.
Todos sin excepción.
¡Estemos pendientes!
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