El único recurso… ¿o la última esperanza?
Cadena de Mando
Por Juan Ibarrola C.
04.06.2022
La mayor parte del análisis sobre las elecciones de mañana, resulta en un panorama de violencia, manipulación electoral y en suma, de resultados no de triunfo para quienes ganen, sino más bien, evidencia de que no importa el cómo, más bien lo que importa es ganar a como dé lugar con miras al proceso de 2024.
Cada vez son más las voces que, desde su punto de vista, evidencian todos los yerros de este gobierno, su afectación y por ende, un futuro negativo. Estas voces señalan como único culpable al Presidente y al debilitamiento institucional que ha provocado. Dan cuenta del cómo se deja de lado a los verdaderos problemas nacionales, por atender justo la necesidad de no perder el poder el próximo sexenio.
El que tengan razón estas voces no es motivo de este texto. En la crítica y en los múltiples señalamientos dejan fuera a las reales fortalezas nacionales y en ello intentan crear una tendencia de que este país va sin obstáculos a la pérdida de todo lo que conocemos como país.
Suponiendo sin conceder que los grupos criminales dominan gran parte de la vida diaria de este país, no se puede considerar como una realidad que llegó para quedarse. Imaginar a unas fuerzas armadas derrotadas o entregadas a esa supuesta realidad, sería negar que una de las grandes fortalezas de este país no esté haciendo todo para que no suceda.
Sin simplismos o bien sin ingenuidades, existen tropas militares, navales y aéreas comandadas por oficiales quienes, a su vez, son supervisados por jefes y capitanes quienes, por cadena de mando, son dirigidos por generales y almirantes y, todos ellos en conjunto, han demostrado que hoy ante los retos nacionales son el único recurso y la última esperanza.
Ante lo negativo del porvenir, de corto y mediano plazo, no se puede olvidar que la conducción y administración del país recae en el gobierno en turno, pero se debe aceptar que existen amenazas reales que pueden debilitar a México si no se enfrentan dejando de lado a la política y a los ideales.
Nunca un soldado o un marino estarán dispuestos a perder sin luchar.
Los militares, en una realidad de guerra, rinden la plaza solamente cuando el adversario los supera en capacidades, estrategias y recursos, lo que sin duda no es el caso de quienes quieren debilitar a México, como por ejemplo, los criminales.
Pero no solamente son los criminales o bien las personas; existen también una serie de factores vulnerables para el país como son la salud pública, la educación, el desarrollo social y por supuesto la política. En todo lo anterior las fuerzas armadas son una fortaleza institucional, es decir, el frente para ganar a los enemigos de México.
Todos, propios y extraños, quienes pretendan debilitar y desestabilizar a México, no deben olvidar que este país no es solamente política o bien intereses de grupo. Esas experiencias ya se han tenido en el pasado y muchos han intentado enfrentar al país, creyendo que no hay quién lo defienda.
No es la búsqueda de gloriosas epopeyas lo que mueve a los soldados.
Los soldados no podrían existir sin su país y éste tiene un gran recurso y una clara esperanza.
Cabo de Guardia.
Buena mar y mejores vientos para los marinos mexicanos.
“Que nunca falte una braza de agua bajo tu quilla”.
tyb
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@elibarrola
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