¿Vecinos distantes o socios principales?

¿Vecinos distantes o socios principales? - Milenio - Blinken

Cadena de Mando 
Por Juan Ibarrola C. 

07.10.2023

La visita esta semana de la delegación del gobierno estadounidense, para llevar a cabo las reuniones del Grupo de Alto Nivel, deben analizarse bajo la óptica de la responsabilidad compartida que México y Estados Unidos tienen para enfrentar los mismos retos de seguridad.

Vecinos distantes, debido a que Estados Unidos es el país más poderoso del mundo, y sí bien antes de la firma del TLC (1994) la distancia entre ambos países era muy grande, los casi 30 años siguientes han provocado la necesidad de que entre socios se asuman responsabilidades domesticas, pero también compartir esfuerzos para que las amenazas no tengan resultados negativos para ambos, en diferente medida, pero al final de gran impacto.

La sociedad entre ambos países es —además de la comercial— cultural, social y política. La mexicanización dentro de Estados Unidos es notable y, cada día, perdurable, lo que obliga a los socios a comprenderse mejor en todos los sentidos, hasta llegar a una responsabilidad mutua que logre frenar, por ejemplo, la terrible realidad del narcotráfico, de la trata de personas, de las adicciones y de la generación de violencia que los grupos criminales de ambos países producen.

Vecinos distantes, debido a que allá sigue existiendo el intento de supremacía, que es natural en la hegemonía americana. Insisten en que México produce fentanilo, cuando en realidad los grupos criminales mexicanos no realizan el proceso de síntesis orgánica para obtener fentanilo; la materia prima llega de China, principalmente, dejando a los laboratorios clandestinos únicamente las ultimas fases de su elaboración, es decir, mezclar precursores químicos con otras sustancias que al reaccionar químicamente generan fentanilo.

Socios comerciales que deben aceptar su realidad individual y compartida, para enfrentar mejor a los grupos delictivos, que por un lado generan muerte entre los americanos y estados de violencia entre los mexicanos. Como ejemplo, México envía drogas, que ellos compran en su totalidad, y ellos envían armas y millonarias ganancias para los criminales mexicanos.

Si bien la política es la que prevalece en esta relación de socios comerciales, la relación militar y naval de México y Estados Unidos goza de un gran momento, producto de años de construirla y mantenerla, y bajo ninguna circuntancia debe soslayarse, al contrario: la amenaza que los republicanos siguen llevando desde sus curules y debates sobre la posibilidad de enviar tropas a México para atacar de manera directa a los grupos criminales, debe quedarse como parte del discurso electoral por ganar la presidencia a los democratas el año entrante.

Las fuerzas armadas mexicanas han sido parte activa de la lucha en contra de los grupos delictivos, lo que a los americanos les genera confianza, ya que comprenden mejor que nadie la importancia institucional que tienen nuestros soldados de tierra, mar y aire.

 

Cabo de Guardia

En la entrega pasada expuse la “otra violencia”, esa que se está generando entre nuestros jóvenes y que cada día nos sorprende de manera alarmante.

Esta semana, un jóven de 14 años atacó a su maestra con una navaja, hiriéndola en brazos y pecho, delante de todos sus compañeros.

La historia dio un vuelco, al suspuestamente ser la maestra quien violentaba verbal y discriminatoriamente al joven agresor. Sin embargo, la otra violencia ahí esta presente y se incrementa día a día.

Otro joven aplicó a una compañera una “llave china”, hasta desmayarla.

Paremos esto.

Son nuestros jóvenes. 

 

Por Juan Ibarrola C. 

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